La tesitura en la que nos ha colocado la "Justicia" española hace un mártir
de Baltasar Garzón, que tiene sus claroscuros. No obstante, a estas alturas
de la película, el mensaje para la sociedad está claro: determinadas
poderes y tramas son intocables. Y eso es lo que no debemos permitir. No se
trata de Garzón, el asunto va mucho más allá. Se trata de una intimidación
a cualquier juez, que desde ahora se va a pensar muy mucho a la hora de
actuar contra los grandes delitos. Se ha pasado de la connivencia de
ciertos sectores judiciales con los grandes delitos económicos a la
intimidación de cualquier juez que quiera investigar. En el caso de los
crímenes franquistas, más de lo mismo...
Por eso hay que acudir a la manifestación que tendrá lugar el próximo
domingo a las 12 en la Plaza de las Salesas.
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